McPherson, Kansas, Estados Unidos, 1933.
Fue uno de los pioneros en el cine experimental y uno de los artistas más destacados de la posguerra. Su espíritu impredecible e inclasificable aún nos continúa hechizando, provocando y atrayendo. Conocedor de los cánones del cine clásico y de vanguardia, sintió inclinación por el producto híbrido. Se opuso abiertamente al academicismo y a la enseñanza reglada. Desarrolló un método rápido de edición que definió su obra. Incorporó imágenes de una variedad de fuentes y agregó su propio metraje de 16 mm. Fue reconocido por sus películas en las que creó un montaje visual único a través de la edición hábil y pionera del metraje encontrado. Sus películas, aunque unen fragmentos de metraje dispares parecen tener continuidad visual, gracias, en parte, a un potente acompañamiento musical. Rinden homenaje a los avances de los estrenos cinematográficos donde los efectos visuales y sonoros superan con frecuencia la lógica narrativa.
Destacó en técnicas como el “ensamblaje” y el Found footage. También trabajó con otras artes como el dibujo, la escultura, la pintura, la impresión, el collage, el cine, la performance y la fotografía. Poseyó la habilidad de crear obras de gran presencia visual.
Se preocupó por los temas candentes en la sociedad americana: la sociedad de consumo y la amenaza nuclear. Sus películas se centran en temas inquietantes pero absolutamente actuales. Desenmascara los mensajes sociales y políticos ocultos en las noticias, los cortometrajes educativos, las películas pornográficas. También se preocupa por la propiedad intelectual, los derechos de autor y la creatividad genuina.
Conner parte de un inigualable repertorio cinematográfico con técnicas de edición como el tour-de-force, la comedia visual y los temas apocalípticos. Conner imaginó esta obra como una búsqueda metafísica de renovación más allá de los mundos naturales y efímeros.
Falleció en 2008 en San Francisco, California.
Obras en la colección: