Autor: Gary Hill
Video en color y sonido estereofónico.
En esta obra podemos ver un altavoz en la pantalla (abarca toda la pantalla) y el artista comienza a hablar, refiriéndose al propio orador. A esto le siguen más declaraciones de lo que está diciendo, “…una mano entra en el cuadro…”. Podemos ver como una mano llena de arena entra en la imagen y poco a poco va soltando arena en el cono del altavoz. La voz vibra en el cono del hablante y los granos de arena van rebotando en el aire. A medida que va hablando más se llena de arena el cono (la mano suelta cada vez más arena). La voz se va confundiendo con los granos de arena, se fusiona la voz con ella. Cada vez se ve menos el altavoz hasta que finalmente se cubre de arena y el timbre de voz cruje y se silencia totalmente. Cuando el altavoz (la voz del hablante) está totalmente enterrado de arena, la voz suena en la distancia pero considerablemente clara.