Granada, España, 1904.

Creador de un talento artístico y tecnológico extraordinario, ''creyente del cinema'' e iluminado por unos nuevos horizontes que formuló mediante las siglas PLAT, que equivalen al concepto totalizador de Picto-Lumínica-Audio-Táctil. En su laboratorio PLAT se dedicó a la experimentación y a la exploración tecnológica, tanto en aspectos concernientes al cine y a los retos planteados en su tiempo (cine sonoro, en relieve, en color, en pantalla ancha, etc.), como en la electroacústica, la radio, la televisión y las aplicaciones educativas de los medios audiovisuales. Algunas de sus invenciones son soluciones prácticas de su época, pero otras se adentran en la noción de espectáculo total, con un instinto visionario insólito, como el Desbordamiento Apanorámico de la pantalla y la persecución de un Cubismo acústico y visual mediante el sonido Diafónico, dialéctico, y la Tactilvisión, con técnicas basadas en una iluminación pulsatoria precursora de la realidad virtual.

En 1928 anticipó ya varias de sus técnicas más características, incluyendo el «desbordamiento apanorámico de la imagen», la salida fuera de los límites de la pantalla, y el concepto de «visión táctil». Durante su experiencia en las Misiones Pedagógicas de la República (1931-1935) desarrolló un profundo conocimiento antropológico de la capacidad del cine sobre las masas. Partiendo de esa experiencia empezó a concebir una obra en la que la percepción del espectador pasa a ser el elemento de referencia de la creación artística.

Contemporáneo de Federico García Lorca, Luis Cernuda, Josep Renau, María Zambrano y otros miembros de la llamada “Edad de Plata” truncada con el golpe de Estado de 1936 y la Guerra Civil.

Su obra y su tenaz actividad investigadora, a contrapelo de la incomprensión y el olvido, no empezaron a ser redescubiertas hasta poco antes de su muerte.

Falleció en Madrid en 1982.